El retrato olfativo de un hombre con carácter, fascinante e inaprensible. Una composición amaderada-especiada-ambarina única y afirmada, en un frasco masculino de líneas francas y depuradas. Una composición amaderada-especiada-ambarina inédita con una personalidad afirmada. El frescor vigoroso de la Mandarina y del Cilantro, sutilmente especiado, se abre sobre las notas cálidas y envolventes de la Rosa de Turquía. La combinación de la Madera de Sándalo de Nueva Caledonia, de la Vainilla de Madagascar y de la semilla de Ambreta le confiere una estela sensual y oriental.